MIRALUX

 
 
 
 
 

NUEVA LEY SOBRE EL COMERCIO DE LAS OBRAS DE ARTE
 
El primero de junio del 2005 entra en vigor la nueva ley federal sobre el comercio de bienes culturales. Suiza se mete en línea con la Convención Unesco del 1970.
 
En pasado Suiza era considerada como un punto de tránsito para las obras de arte robadas a causa de su reluctancia a adherir a las leyes sobre el traslado de bienes culturales.
Hechos & Cifras  
- 1962: Suiza ratifica la Convención del Aia del 1954 para la protección de los bienes culturales en caso de conflicto armado.
- Octubre del 2003: ratificación de la Convención Unesco del 1970 contra el tráfico ilícito de bienes culturales.
- el 1 de junio de 2005: entrada en vigencia la nueva ley en Suiza sobre el traslado internacional de bienes culturales, ley aprobada por el parlamento en el junio del 2003.
En síntesis  
La nueva legislación helvética obliga a comerciantes y casas de subasta a identificar en modo claro la procedencia de los objetos y la identidad de proveedores y clientes.
 
Los propietarios de bienes culturales substraídos ilegalmente tendrán 30 años-y no solo 5-para exigir su restitución.
 
Suiza es uno de las cinco más importantes plataformas mundiales de cambio de objetos de arte. El volumen del import/export esta alrededor de 1,5 mil millones de francos.
 
"Los bienes culturales no son mercancías normales", afirma Andrea Raschèr, responsable de la sección de negocios internacionales y legales de la oficina federal de la cultura. Hay una diferencia si a alguien se le roba un televisor o una obra de arte."
 
"En Suiza, el tráfico ilegal de bienes culturales se ha convertido en un tema de discusión importante desde hace algunos años, cuando se ha empezado a reflexionar sobre el problema de la expropiación de las propiedades a los judíos durante la Segunda guerra mundial."
 
"La discusión se ha desarrollado a nivel político", continuo Raschèr, "con el resultado que hora la Suiza está perfectamente en línea con los estándares internacionales."
 
Ovejas negras
 
Gracias a la nueva legislación, los comerciantes de arte y las casas de subasta serán obligados a identificar la procedencia de los objetos y las personas con las que hacen negocioss. Se debería poner fin a la anonimidad que permitia a los objetos de arte de pasar por diversas manos y de ser así "lavados"
 
Quien comercia objetos de arte tendrá que documentar las mismas actividades y ser capaz de proveer informaciones detalladas sobre los bienes vendidos. "Es importante poder separar quien comercia correctamente bienes culturales de las ovejas negras."
 
Los bienes de origen desconocido, a menudo robada, podrán ser puestos legalmente en comercio después de treinta años de su adquisición. Hasta ahora el período fue de cinco solos años y permitió de "dejar" los objetos en el depósito de una aduana para recuperarlos después de algunos años con la certeza que los legítimos propietarios los hubieran reclamado no se habría incurrido en sanciones.
 
La nueva legislación, no se aplicará a las obras de arte cuyo precio de adquisición no supera los 5'000 francos. Un especialista del despacho federal de la cultura se ocupará de monitorar el cambio de bienes culturales para verificar que conteste a los dictámenes de la nueva ley.
 
Herencia cultural
 
Todo eso también desarrolla un papel importante para la protección del patrimonio cultural mundial y debería contribuir a prevenir los robos, los saqueos y la importación ilegal de bienes culturales. Para los objetos procedentes de excavaciones arqueológicas se aplicarán medidas suplementarias.
 
"El comercio internacional es focalizado claramente sobre los objetos de origen arqueológico y étnico", Raschèr afirma, "porque justo éstos son los campos que presenta los mayores problemas: no se puede controlar cosa sale por tierra."
 
"Son estos los bienes que representan fuertemente la identidad de una nación y es por esto que la mayor parte de los países, comprendida Suiza, los protegen de modo decidido."
 
Plataforma de cambio
 
Suiza ha titubeado durante un grande periodo antes de ratificar la Convención Unesco del 1970, que regula el traslado de los bienes culturales y la cooperación internacional. Ahora, por fin, entra en vigencia la ley aprobada por el parlamento en el junio del 2003, que ha llevado a la ratificación de la Convención Unesco en octubre del mismo año.
 
Para la oficina federal de la cultura, Suiza es una de las plataformas de cambio de objetos de arte más importante del mundo. La importación y la exportación de bienes culturales representa un mercado de 1,5 mil millones de francos el año.
 
"A nivel internacional, los bienes culturales robados representan  tercero más vasto mercado ilegal, después del comercio de droga y de armas", Raschèr puntualiza. Un problema que, ve la ausencia de una legislación adecuada, ha sido particularmente agudo en Suiza.
 
Estrella de oro
 
Suiza tiene en todo caso algunos éxitos por cuanto concierne la lucha contra el tráfico ilegal de bienes culturales. En el 2002, hizo noticia la repentina aparición sobre el mercado anticuario internacional el "Disco de Nebra."
 
El disco de bronce y oro tiene un diámetro de 32 cm y tiene un mapa estelar. Con fecha alrededor del 1600 y representa la más antigua representación astronómica conocida.
 
El vendedor afirmó que venía de excavaciones, efectuadas en el 1999 con un metal detector a Nebra, una localidad de la Alemania oriental. En realidad, el disco fue robado en el período de confusión general después de la unificación de las dos Alemanias (1989) y quedó en el mercado negro por años con un precio que era alrededor de los 10 millones de dólares.
 
En la región alemana del Sassonia-Anhalt, dónde el Disco de Nebra ha sido hallado, los restos arqueológicos son considerados de propiedad del Estado. Es pues allí que el mapa estelar más antiguo del mundo ha vuelto, después de haber sido recobrada por la policía de Basilea.
 
swissinfo, Thomas Stephens
, traducción y adaptación, Doris Lucini,